Suspiran por ella más de un centenar de canciones y poemas, como si su magia escondiera las imperfecciones. La Habana o Havana, como ha sellado también su nombre en el firmamento la capital de Cuba, es una oda al tiempo.
Aún en medio de avatares económicos, conserva el orgullo de una isla del Caribe que por pequeña, se afirma en la grandeza de transpirar música, ron, tabaco, historia, naturaleza, mujeres hermosas y cadencia cultural.
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