
Impasible, con aires de elegancia, siempre iluminada de forma natural o colorida en las noches, la Fuente de Cibeles de Madrid es tal vez el sitio más fotografiado de la capital española y su historia de más de 200 años aparece rodeada de enigmas y tradiciones.
Cibeles está compuesta por la figura de la diosa, obra de Francisco Gutiérrez, sentada en un carro tirado por dos leones, diseño de Roberto Michel, concebidos entre 1777 y 1782, la fecha de su terminación por encargo de Carlos III. Y el primer detalle curioso es que los leones del carruaje no se miran. No es ningún capricho del escultor, sino la representación de la historia de Hipómenes y Atalanta.
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