Hay dos soluciones para eludir la debacle general si por fin el mundo se nos acaba en 2012: irse al pueblito francés de Bugarach, o ingresar en el universo onírico, surrealista y apasionante del fútbol con Mourinho, el Real Madrid y el Barcelona.
Bugarach, comuna montañosa de Francia de 200 habitantes del departamento de Aude, en la región sureña de Languedoc Rousillon, es supuestamente el único lugar donde el 21 de diciembre del próximo año será la excepción en las profecías lapidarias de la humanidad.
Al menos eso creen grupos de esotéricos, iluminados, chamanes y hasta buscadores de OVNIS, que esperan la salvación en el pico de Corbiéres, denominado por cierto la Montaña Mágica, en sus 1,231 metros de altura.
Pero dejemos a un lado a Bugarach sumido en temores de una invasión de visitantes llenos de amuletos y piedras místicas.
Para enfrentar todo eso y mucho más, tenemos al técnico José Mourinho, al once merengue y el club blaugrana. El fútbol, invento maravilloso, capaz de enloquecer a 300 millones de personas.
Antídoto intextricable que intenta hacer olvidar por un rato conflictos bélicos, invasiones, desastres nucleares y el cambio climático.
Mientras el mundo hace bastante por autodestruirse, devoramos cientos, decenas y hasta miles de noticias de Cristiano Ronaldo, Lionel Messi, Pep Guardiola (el otro DT) y por supuesto Mou.
Es un placer para los amantes del deporte como quien suscribe y para no andarme con rodeos, me confieso madridista, aunque con mucho respeto y admiración por el Barça y el virtuosismo de los Messi, Xavi Hernández e Iniesta.
Delirio múltiple que si bien revela los poderes impresionantes del dinero detrás de dos clubes multimillonarios, permite andaduras en carriles diferentes a los de una clase política que engaña, se enriquece y dice buscar el bien de la humanidad.
De tal forma, me encanta descubrir cada día que Mou (Mourinho) se enfadó con los reporteros e hizo un desplante en la rueda de prensa; que logró rescatar al alicaído Karim Benzema; o que su sistema comienza a gustar al Santiago Bernabéu.
Las telenovelas de C7, como le llaman al virtuoso portugués Ronaldo; la brillantez del argentino Messi; vaivenes del brasileño Kaká; y la frustración de Iniesta por no tener suficiente reconocimiento aunque anotó el gol de oro de España campeón mundial …
Cotilleos con Gerard Piqué y su romance con las inquietas caderas y toda la anatomía de la colombiana Shakira.
Voilá!. Ya sabemos que para sortear la avalancha amarillista, lamentable, guerrerista o desconcertante, tenemos a Bugarach …, a Mou, Guardiola, Ronaldo, Messi y al Real Madrid y el Barcelona.
Viven en otra galaxia y aunque para mi no son más que dos clubes multimillonarios, ya va siendo hora de que se enteren de este Planeta. Ni Mou, ni Messi, ambos son unos payasos, simuladores y artistas de segunda clase. Que pena por el fútbol.
Me gustaMe gusta
La verdad es que dieron un espectáculo deplorable (Barcelona-Madrid). Fue como un reality show en lugar de fútbol, de pésimos simuladores. Como gran negocio al fin y al cabo, deberían cuidar más su calidad.
Me gustaMe gusta
Al final ganó el Barça, aunque ya comienzan a molestar los dos clubes con la historia del arbitraje. Decepcionante el Real Madrid tambièn.
Me gustaMe gusta
La verdad es que no fue un final hermoso y demuestra que los clubes multimillonarios hacen guerras verbales antes de jugar fútbol.
Me gustaMe gusta
En que termina Mourinho y el caso del Kun Aguero?. Soy del mundo del Madrid y si acaso nos vuelve a ir mal, me lo voy pensando con el pueblito ese de Bugarach.
Me gustaMe gusta
Pues creo que Mourinho seguirá haciendo de las suyas, aunque es un excelente entrenador. Del argentino Kun Aguero ni idea en que termina su telenovela del verano.
Me gustaMe gusta